Diferentes iniciativas del presidente de la república, Nayib Bukele, a través de dependencias del Órgano Ejecutivo, para la obtención, planificación y ejecución de recursos del Estado sientan las bases para la creación de un «nuevo modelo de finanzas públicas», según consideraciones del presidente de la comisión de hacienda y especial del presupuesto de la Asamblea Legislativa, Christian Guevara, y el economista René Martínez Granadino.
En la sesión de trabajo de la comisión de hacienda del 7 de octubre anterior, cuando se ingresó el proyecto de ley del presupuesto general de la nación 2025 para su estudio, Guevara dijo que la comisión tiene una tarea «delicada» que aportará al nuevo paradigma financiero salvadoreño.
«Todos vimos en cadena nacional el anuncio del presidente Nayib Bukele de discutir un presupuesto que por primera vez en décadas no va a ser financiado con préstamos. Yo creo que esta discusión que vamos a llevar en esta comisión está sentando las bases de un nuevo modelo de responsabilidad fiscal en las finanzas públicas», dijo Guevara.
Para el economista y consultor Martínez Granadino, se trata de un nuevo modelo en el que se advierten componentes fundamentales, como el equilibrio fiscal.
«En toda nuestra historia reciente no habíamos tenido un presupuesto equilibrado, con medidas de austeridad; tampoco había trasparencia al momento de discutirlo, como se hace ahora, de cara a la población», afirmó.
Dentro del articulado del proyecto de ley del presupuesto general del Estado para el ejercicio fiscal 2025, que se encuentra alojado en el Portal de Transparencia Fiscal, además de la reestructuración de asignaciones acordes a los nuevos desafíos del país relacionados al área económica se contemplan diversas medidas de austeridad.
Entre esos lineamientos destaca la reducción del presupuesto en algunas áreas, como la Asamblea Legislativa, que disminuirá en más de $7 millones su plan de gastos con respecto al presupuesto de este año.
En el artículo 2 del proyecto de ley se establece la suspensión de incrementos y nivelaciones salariales; así como la prohibición de crear plazas por ley de salarios y contratos por cualquier fuente de financiamiento en todas las entidades de los tres órganos del Estado, incluidas las municipalidades, autónomas y descentralizadas, indicado en el artículo 3.
Se detalla en el artículo 5 que todas las plazas vacantes que se generen solo se podrán reestablecer en el caso de que su reemplazo sea imprescindible e impostergable, pero deberán ser autorizadas por el Ministerio de Hacienda.
Mientras que el artículo 6 indica la suspensión de la creación de nuevas prestaciones económicas y sociales o el incremento de las existentes.
«Este presupuesto es solo una pieza del rompecabezas que se está trabajando para lograr el milagro económico salvadoreño… viene a tirar por los suelos la teoría que tenían periodistas y analistas pagados, quienes decían que entraríamos en “default”», mencionó Guevara.
